viernes, 6 de julio de 2012

Un mundo sin gente 11:ENTRE CUATRO PAREDES


Es infinito el placer que se experimenta al contemplar el arte. Todo lo que se hace con alegría y con amor, da una obra de arte. En las fotografías (no sólo las que están en estas cuatro paredes), encontramos diferentes formas de arte (sea que estén expuestas en marcos de fina madera torneada ó en el sólo recuerdo de cada persona que graba en su memoria la majestuosidad, el deleite de un paisaje). Estas fotografías transmiten las vivencias de igual manera que expresa su sensibilidad un pintor con su pincel al pintar un cuadro al óleo. Es también un arte la diversidad de adornos que forman parte del entorno de estas cuatro paredes o de cualquier otro espacio, y a la vez, dichos adornos, transforman cada habitación grande o pequeña. En ésta, encontramos sillas que se acomodan como en un juego de ajedrez, llenando los espacios, dándoles acomodo a los costados, al frente, en las esquinas. Increíblemente hay objetos que siempre han estado en el mismo lugar, pero no les damos importancia a esos detalles hasta que nos desaseemos de ellos, empiezan a tener un por qué en la historia de esas paredes.

        Saliendo de las cuatro paredes, nos percatamos de un montón de piedras apiladas en el patio de la casa, que sirven de escondite a las ardillas. Han servido también como asoleadero de ropa, hay un jardín con hermosas flores, de pronto el viento me hace percibir grandes árboles que bajo sus ramas proporcionan sombra, oxigeno, diversión.

Al mecer sus ramas producen un sonido semejante a un suave arrullo; luego el cielo se llena de sonoros y luminosos avisos ya que se acerca una tormenta. En un segundo, inician las gotas de lluvia que escucho ahora mismo caer con simultánea insistencia hasta formar una corriente de agua que al instante forma ríos: avanzan destruyendo por doquier, arrastra a su paso toda clase de objetos, animales, casas; devastándolo todo.

Mis ojos se posan admirados en las fotografías que desde temprana edad  recuerdo en las cuatro paredes fotografías que han conservado el espíritu el alma de la gente que son parte esencial de mi vida,  también remembranzas  y  hechos gráficos de familia. Llueve afuera, para que llueven adentro, los recuerdos. 


Nombre: C. Nora Ivón Ortega González.                                                  27/06/2012
Correo Electrónico:   Noryivonee@Hotmail.Com
Biblioteca : Guadalupe  Martínez  Ortega
Ciudad: Tételes de Ávila Castillo, Puebla

No hay comentarios:

Publicar un comentario