Un día de invierno llegó a la
hermosa ciudad Libro la señorita Portada para visitar a su amiga Lomo. Portada
tenía muy mal carácter pero a pesar de ello era muy bonita.
Visitó las mejores atracciones
que ofrecía la ciudad. Todo le parecía poca cosa y criticaba todo a su
alrededor. Cuando estaba a punto de volver a la cuidad Imaginación donde
residía antes, su amiga Lomo le pidió una disculpa porque como siempre tiene
que cargar con todo el trabajo, era imposible tomarse un descanso pero que en
otra ocasión podría acompañarla; visitó el parque de diversiones Biblioteca, en
su visita se adentro en la sección de sorpresas, estaba completamente vacío, se
sentó en un banco de nubes cuando de repente vio una sombra y se sentó junto a
ella un joven y al momento de decir las primeras silabas de hola, Portada se
retiró.
Ahí terminó la conversación, ella
no quería saber nada de amigos o algo por el estilo, sólo pensaba lo fastidioso
que era lidiar con personas de esa ciudad tan retrasada.
El clima impidió el viaje de Portada
por largas semanas, su dinero se le terminó y tuvo que buscar trabajo
inmediatamente en una oficina de correo postal. Al pasar poco tiempo decidió
quedarse a vivir ahí ya que le pagaban con muy buenas letras (dinero), sin
embargo le costó mucho trabajo comprender la ciudad y acostumbrarse al trabajo
duro.
Un día por la mañana, al estar
escribiendo Portada una carta al señor Solapa, llegó el mismo joven que
intentaba hablarle en el parque de diversiones Biblioteca, pero ella no notó su
presencia hasta que empezó arremedar las líneas que escribía en voz alta,
Portada seguía escribiendo mientras decía:
—Hola, buenos días ¿en qué te
puedo ayudar?—. Dejó de realizar su trabajo, vio detenidamente al joven y dijo:
—Hola señorita, muy buenos días,
me preguntaba si podría redactarme una carta muy importante—. Portada contestó:
—Claro, empecemos—. El joven
dijo:
—Por favor, sólo quiero que anote
las siguientes líneas: Desde aquel día no puedo olvidar tus decorados (ojos).
Sólo quiero ser tu amigo y que respondas mi carta aceptando mi invitación a
comer esta tarde en el restaurante de la esquina.
—Muy bien señor, ya está escrito
ahora dígame el nombre del destinatario por favor—. El joven veía
cuidadosamente el gafete del nombre de la señorita y respondió:
—Portada—. Ella se asombró mucho
y preguntó si la carta se dirigía a ella y él respondió que sí.
—Sólo te quiero preguntar algo
¿Cuál es tu nombre? y aceptaré tu invitación gustosamente—, preguntó Portada.
—Me llamo Contraportada, mucho
gusto en conocerte, te espero a las 3:00 pm y hasta luego—. Portada se sintió
muy alegre y fue el único día de su vida que su humor cambió completamente y
asistió puntualmente a la cita, Contraportada llevó unas hermosas flores y
discutieron sus gustos y enojos. Cada vez las invitaciones a distintos lugares
eran más frecuentes y sin igual. Todo parecía indicar que eran almas gemelas
hasta que un maravilloso día por fin entablaron una relación.
Mientras paseaban juntos caminando
por el parque se encontraron a Lomo que al ver a Contraportada quedó flechada
por Nervio, por desgracia y accidentalmente. Ella planeó detenidamente cómo
separar a la pareja perfecta y conseguir su máximo objetivo: un odio profundo
del uno por el otro. Sólo pudo separarlos por una semana de gran tristeza y
soledad ya que Portada se sintió muy ofendida por un recado que, como
remitente, indicaba que era Contraportada y viceversa. Ganó el orgullo y el
desentendimiento pero se amaban tanto que dejaron a un lado sus rencores y
arreglaron sus problemas.
Lomo puso en marcha más planes
pero no funcionaron, hubo demás confrontaciones entre ellos, por cosas sin
importancia hasta que un día como hoy se casaron en el lugar donde se
conocieron. Pero lo más importante es que iban escribiendo más páginas de su
bella historia: sorpresa inesperada.
Escribió Michelle López Ochoa.
Biblioteca ‘‘Héroes de la
Revolución Mexicana’’ No. 912.
Santa María Coronango, Puebla.
Felicidades,me gusto la forma en que se desarrollo la historia de amor con portada.
ResponderEliminarTienes una bonita imaginacion y talento.